jueves, 7 de junio de 2012

Y estás parada.

 Mirando los coches pasar, los semáforos en rojo, las motos que pasan a toda velocidad casi rozándote, fijándote en la gente que pasa por delante tuyo, deprisa, como si hubieran dado a una tecla para que todo se duplique y vaya el doble de rápido, los ves pasar y tu sigues parada, inmóvil sin poder moverte o más bien sin querer. Te limitas a observar pasar el tiempo sin hacer absolutamente nada, como si todo lo que ocurriese te fuera indiferente. Haz una cosa, alarga tu mano, intenta tocar algo de tu alrededor. Intenta hacer que cambie, o intenta que haga lo que tu deseas. Eso es lo que deberías de haber hecho desde hace mucho, intentar que tu vida se guíe por lo que tú quieres y no por lo que los demás desean o por que pase la vida sin más. Y ahora hazme un favor, la próxima vez que te quedes parada sin saber que hacer recuerda que la vida no está hecha para verla pasar como si fuera una película. Recuerda que si la vida es un sueño, es tu sueño y puedes hacer lo que quieras con él.